El turismo es una excelente manera de generar crecimiento económico en las economías en vías de desarrollo. En el caso particular de Venezuela, y más específicamente, de Mérida, no es la excepción.
Cuando hablamos de turismo como industria, sabemos que es un área económica bastante atractiva, debido a que todas las personas les gusta salir a aventurarse a lugares fuera de sus ciudades o pueblos de habitad común, para observar cosas diferentes y/o simplemente descansar de la rutina. Cuando la gente se dispone a esto, tiende a ahorrar cierta cantidad de dinero que sus ingresos le permitan, convirtiendo esto, a esas personas, en clientes jugosamente atractivos para cada una de las regiones y lugares que se perfilan como destino, ya que es allí donde podrá parar ese dinero que está por ser gastado (o quizás invertido en la producción de placer y comodidad de las personas).
Es por esto que el turismo es una de las industrias que más empleos genera anualmente a nivel global, ofreciendo al recurso humano que allí se desempeña, oportunidades magníficas de surgir económica, social y profesionalmente.
El área metropolitana de la ciudad de Mérida ofrece un atractivo único a sus posibles visitantes, que es la presencia de majestuosas e imponentes montañas, aunado esto a un excelente clima de elevaciones tropicales, gente cordial y cálida (emocionalmente hablando), el teleférico, los paisajes andinos, los pueblitos de construcciones antiguas (estilos coloniales españoles).
Todo esto ofrece unas excelentes posibilidades de desarrollo sustentable de la región basado en esta pujante industria, la cual además tiene bajos impactos de contaminación ambiental, y fortalece la producción agrícola y pecuaria del país, la cual garantiza la producción de alimentos para la población local y nacional.
Cuando hablamos de turismo como industria, sabemos que es un área económica bastante atractiva, debido a que todas las personas les gusta salir a aventurarse a lugares fuera de sus ciudades o pueblos de habitad común, para observar cosas diferentes y/o simplemente descansar de la rutina. Cuando la gente se dispone a esto, tiende a ahorrar cierta cantidad de dinero que sus ingresos le permitan, convirtiendo esto, a esas personas, en clientes jugosamente atractivos para cada una de las regiones y lugares que se perfilan como destino, ya que es allí donde podrá parar ese dinero que está por ser gastado (o quizás invertido en la producción de placer y comodidad de las personas).
Es por esto que el turismo es una de las industrias que más empleos genera anualmente a nivel global, ofreciendo al recurso humano que allí se desempeña, oportunidades magníficas de surgir económica, social y profesionalmente.
El área metropolitana de la ciudad de Mérida ofrece un atractivo único a sus posibles visitantes, que es la presencia de majestuosas e imponentes montañas, aunado esto a un excelente clima de elevaciones tropicales, gente cordial y cálida (emocionalmente hablando), el teleférico, los paisajes andinos, los pueblitos de construcciones antiguas (estilos coloniales españoles).
Todo esto ofrece unas excelentes posibilidades de desarrollo sustentable de la región basado en esta pujante industria, la cual además tiene bajos impactos de contaminación ambiental, y fortalece la producción agrícola y pecuaria del país, la cual garantiza la producción de alimentos para la población local y nacional.
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